El detalle en la pintura toma su máxima expresión en el Renacimiento. Usando nuevas técnicas de representación y el estudio de las proporciones, pintores del Renacimiento hacen obran son gran detallado. En este caso, Da Vinci le da un gran detalle al rostro femenino, mostrando arrugas en los ojos, las sombras hechas por la luz y una sonrisa misteriosa. Es la época dorada en la pintura.
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